Es literal el paraíso, alejado de todo el bullicio, sin señal de teléfono, ideal para desconectarte del mundo, el personal del hotel increíblemente amable, mi habitación hermosa, amplia, limpia, súper cómoda, solo recomiendo llevar un buen repelente y algo que mantenga alejando a los moscos porque abundan y no puedes ni comer a gusto en el restaurante, que por cierto me pareció algo caro, pero fuera de eso la estancia fue de lo mejor.