Teníamos la parada del tranvia en frente y puede que para las personas con sueño ligero oigan el tranvia, en nuestro caso, no nos llegó a despertar. Tener el tranvia en frente facilita el transporte por toda la ciudad. La única pega, pero fue culpa nuestra, es que no leímos que el hotel no tenía sábanas y tuvimos que comprarlas allí. También nos tuvimos que comprar unas toallas pequeñas, porque la toalla de mano que daba el hotel en nuestro caso estaba rota, yo creo que la gente la usaba para salir de la ducha y de ahí que estuviera rota. Yo sinceramente no soy muy exigente y yo iba de viaje a ver la ciudad, como hotel para dormir esta bien, habitación cómoda y calentita.